La luz, el clima, las playas, las montañas, la gastronomía y el trato amable de sus gentes hacen de España un destino de primera fila para el turista europeo o americano pero aún tiene que meterse en el bolsillo al viajero asiático que aunque está ganando adeptos, le queda trabajo por hacer.
Lucía Zhang, jefa de Grupos de Viajes Extremo Oriente, explica las curiosas reglas de oro que los hoteles deben atender para captar al turista chino.
SUPERSTICIONES A TENER EN CUENTA
Los hoteles deben conocer bien las supersticiones de los clientes asiáticos y nunca darles una habitación en la planta 13 o, peor aún, en una habitación que contenga el número 4 -su pronunciación es casi idéntica a la de la palabra «muerte».
CEPILLO DE DIENTES
El turista de China, normalmente de gran poder adquisitivo, no entenderá un alojamiento en el que no se le facilite un cepillo de dientes, uno de esos imprescindibles que dan por hecho tendrá en su cuarto de baño.
ALBORNOZ Y ZAPATILLAS
El turista chino hace sus reservas según las recomendaciones de otros clientes de su misma nacionalidad con lo que será importante conocer la importancia que dan a descalzarse y usas zapatillas, algo que hasta los establecimientos más humildes de China ofrecen. Algo similar ocurre con el albornoz aunque este si es verdad está reservado para hoteles de 4 o 5 estrellas.
DISPENSADORES DE AGUA CALIENTE
Los chinos suelen beber agua caliente, sobre todo antes de acostarse, y están acostumbrados a disponer de dispensadores. Un alojamiento que quiera ganarse la confianza de estos clientes deberían atender esta petición antes de que el cliente lo solicite.
ENCHUFE, PLANCHA Y TINTORERÍA
Viajar a Europa supone para el turista asiático un fuerte cambio no solo de costumbres si no también de tecnología. Poner a disposición enchufes transformadores, plancha de la ropa y tintorería rápida ahorrará tiempo y preocupaciones al cliente a la vez que dará una brillante imagen del alojamiento.
DESAYUNO CHINO
La hora del desayuno es un momento importante ya que los turistas asiáticos no están acostumbrados al típico bufet continental a base de jamón, queso, huevos o ensaladas. El chino agradecerá un pequeño apartado con sopa de arroz o huevos cocidos.
Fuente: ABC